Auditoría energética: ¿por qué está de "moda" analizar la eficiencia?

Cada día existe una mayor conciencia medioambiental en la sociedad, tanto a nivel personal como empresarial. Es una evolución lógica, ya que el modelo energético que el mundo entero ha seguido durante tanto tiempo no es sostenible.

Las energías renovables han supuesto un cambio radical en la producción de energía a todos los niveles, aunque destacan por encima del resto el medioambiental y el económico. Son fuentes inagotables de energía, de generación 100% limpia y mucho más baratas que cualquier otra forma de producción eléctrica. Por estos motivos no sería lógico que el ser humano dejase de aprovechar estos recursos, tan al alcance de nuestra mano, con el objetivo de evolucionar hacia un modelo de vida mucho más sostenible.

Con el objetivo de lograr una mayor implantación de las energías renovables en nuestro país, el 12 de febrero de 2016 salió a la luz el Real Decreto 56/2016. Este RD obliga a ciertas empresas (aquellas que cumplan unos determinados criterios) a analizar su perfil de consumo energético para conocer sus probabilidades de ahorro energético.

¿Qué son las auditorías energéticas?

Según el RD 56/2016, una auditoría energética se define de la siguiente manera:

“Todo procedimiento sistemático destinado a obtener conocimientos adecuados del perfil de consumo de energía existente de un edificio o grupo de edificios, de una instalación u operación industrial o comercial, o de un servicio privado o público, así como para determinar y cuantificar las posibilidades de ahorro de energía a un coste eficiente e informar al respecto.”

El objetivo de estas auditorías energéticas es, principalmente, reforzar la seguridad del abastecimiento energético y reducir las emisiones contaminantes de las grandes empresas a través de la implementación de medidas de eficiencia energética.

El RD 56/2016 establece la obligación para las grandes empresas de pasar auditorías energéticas cada 4 años. A nivel legal, se entienden como grandes empresas las que cumplen cualquiera de los siguientes requisitos:

1. Más de 250 trabajadores.
2. Volumen de negocios anual que excede los 50 millones de euros.
3. Balance general anual que excede los 43 millones de euros.

Estas empresas están obligadas a realizar una auditoría que cubra, al menos, el 85% del consumo total de energía final del conjunto de las instalaciones ubicadas en el territorio nacional que formen parte de las actividades industriales, comerciales y de servicios que dichas empresas y grupos gestionan en el desarrollo de su actividad económica.

Las auditorías energéticas que se lleven a cabo deben cumplir ciertos criterios que se encuentran especificados en este RD:

• Tienen que basarse en datos operativos recientes, que puedan comprobarse, de consumos de energía y de perfiles de carga siempre y cuando se disponga de ellos.
• Deben incluir un análisis detallado del perfil de consumo de los edificios, instalaciones o servicios, privados o públicos, con inclusión del transporte dentro de las instalaciones.
• Siempre que se pueda, se basarán en rentabilidad en el análisis del coste del ciclo de vida, antes que en periodos simples de amortización. Así se consigue tener en cuenta el ahorro a largo plazo, los valores residuales de las inversiones y las tasas de descuento.

Ventajas asociadas a una auditoría energética

A pesar de ser una acción obligatoria para las empresas que cumplan con los criterios antes descritos, no hay que ver la auditoría energética como un coste extra que tienen que asumir dichas empresas, sino como una oportunidad de ahorro.

A través de una auditoría energética se puede detectar la posibilidad de lograr grandes ahorros mediante la instalación de un sistema de generación de energía basado en fuentes de origen renovable, como por ejemplo la fotovoltaica.

Implantando un sistema fotovoltaico, que produce energía a través de los módulos que absorben la radiación solar, se consigue una importante reducción de la demanda energética del edificio. Y al dejar de consumir esa energía de la red eléctrica, se consigue un ahorro en la factura eléctrica y se evita la generación de residuos y la emisión de gases contaminantes que producen las fuentes de energía más tradicionales.

Posibilidades de ahorro tras una auditoría energética

En relación a la eficiencia energética, hay muchos campos en los que se pueden realizar ciertas acciones para generar un ahorro de energía y económico. Algunas de estas posibles mejoras son las siguientes:

• Instalación energías renovables
• Iluminación eficiente
• Variadores electrónicos
• Motores de alto rendimiento
• Eliminación del coste de Reactiva

Los focos principales donde se produce un mayor ahorro son los dos primeros. Con una instalación de energías renovables se puede producir gran parte de la energía que, de otra manera, se consumiría de la red eléctrica, evitando así este coste.

Por otra parte, la iluminación de los edificios es uno de los mayores gastos energéticos de una empresa. Con una sustitución de los equipos luminosos existentes por nuevos modelos más eficientes, se consigue una importante reducción en el gasto de electricidad, además de mejorar las condiciones de confort y salud de los propios trabajadores.

EDP realiza anualmente campañas de auditorías energéticas para mejorar la eficiencia energética de las empresas interesadas. Se procede a realizar un estudio personalizado de los consumos de cada empresa y sus posibilidades de ahorro. En todos estos estudios se detalla el ahorro anual que supondrá para la empresa estas contrataciones.

Contamos con varios métodos de pago orientados a la flexibilidad hacia el cliente y con las máximas facilidades, como el modo de servicio con la posibilidad de Oferta de Recuperación, en la que el ahorro anual supera a la cuota a pagar. Este modo, además, no requiere aval ni se paga cuota durante los 6 primeros meses. Además, si contrata un servicio de más de 12.000 euros con EDP, realizaremos una auditoría energética GRATIS.